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  • 4/29/2019

El SOIVRE participa en el decomiso de 76 tortugas transportadas de manera ilegal

Decomiso de 76 ejemplares de Aldabrachelys gigantea

Intervención en el aeropuerto de Barcelona

La Secretaría de Estado de Comercio, en su calidad de Autoridad Administrativa CITES, a través del Servicio de Inspección SOIVRE, ha participado en el decomiso de 76 tortugas gigantes de Aldabra (Aldabrachelys gigantea) a raíz de la intervención efectuada en el aeropuerto de Barcelona en colaboración con la Guardia Civil y Aduanas.

La especie es originaria del atolón Aldabra (Islas Seychelles), sin embargo también ha sido introducida en otras áreas de distribución como Tanzania, Madagascar, Islas Mauricio y otras islas de Seychelles. Se trata de una especie listada en los apéndices del Convenio CITES (Convenio Internacional sobre el comercio de especies amenazadas de flora y fauna silvestre) para cuya importación es necesario la presentación en la aduana de entrada de un permiso de importación expedido por la Autoridad Administrativa CITES de España.

Al no llevar dicha documentación acompañando a los animales, se ha procedido a la incautación de dichos ejemplares CITES.

Por el momento las tortugas se encuentran divididas en dos grupos. Un primer grupo de 38 ejemplares ha sido enviado al Zoo de Barcelona para su cuidado y manutención. Un segundo grupo también de 38 tortugas, ha sido enviado al Centro de Recuperación de anfibios y reptiles de Cataluña (CRARC).

Este último, es uno de los 24 centros de rescate con los que la Secretaria de Estado de Comercio ha firmado convenio para enviar los especímenes vivos decomisados por comercio ilegal.

Allí los animales están siendo atendidos por veterinarios y se encuentran en buen estado  a la espera de que se dicte resolución judicial en firme que permita decidir el destino definitivo de los animales incautados en conformidad con lo previsto en el Real decreto 1333/2006.

Se estima que el valor de estas tortugas puede alcanzar los 110.000 euros y los infractores podrían llegar a enfrentarse a una sanción de hasta el doble o el triple de dicho valor.