En el primer trimestre del año mejoró la competitividad española, según el Índice de Tendencia de Competitividad (ITC) calculado con el Índice de Precios de Consumo (IPC), frente a la UE-28, la OCDE y los países BRICS.

Este índice, cuyas reducciones reflejan ganancias de competitividad, disminuyó un 0,8% frente a la UE-28 en el primer trimestre de 2020, prolongando una tendencia iniciada el primer trimestre de 2019. La ganancia de competitividad se debe al descenso del índice de precios, que fue superior a la apreciación del euro frente a las divisas de aquellos países comunitarios que no pertenecen a la zona euro.

Frente a la OCDE, el ITC se redujo un 1,4% por una evolución de los precios en España más moderada que en la OCDE y por la depreciación del euro frente a las principales monedas de esta zona.

En relación con los países BRICS, el ITC decreció un 2,8% interanual en el primer trimestre. La ganancia de competitividad frente a esta zona se debió a la reducción del  índice de precios (-3,9%), mientras que el índice de tipo de cambio aumentó un 1,1%.

Los últimos datos del ITC calculados con otros índices de precios o costes corresponden al cuarto trimestre de 2019 y confirman las ganancias de competitividad. El ITC medido con Índices de Valor Unitario (IVUs) mejoró frente al conjunto de la UE-28 (-0,5%), principalmente por la reducción del índice de precios relativos. Frente a los países de la OCDE, el ITC se mantuvo estable (0,0%). El ITC calculado con Costes Laborales Unitarios (CLUs) frente a la UE-28 decreció un 1,5%, consolidándose la tendencia de mejora de competitividad registrada los últimos trimestres. La causa fue el comportamiento del índice de costes laborales unitarios, que se redujo un 1,4%, unido al del índice de tipo de cambio que cayó un 0,1%.